El sueño de un ciego.

El se había acostumbrado a vivir sin ella y fue justo ahí cuando ella apareció, no era la mujer perfecta, tampoco eso buscaba, simplemente era ella con sus defectos y virtudes.
El jura que no sabe como llego hasta el y ese desconocimiento le dio un sabor especial al encuentro, le hizo notar lo mágico de la situación y potencio sus sentimientos.
El pensó que esos días juntos le alcanzarían para robar su corazón y se entrego por completo a la ilusión de poder con ella huir a donde nadie los fuera a buscar.
El creyó haber logrado su objetivo cuando ella le sonreía, le decía que lo amaba y no necesitaba a nadie más para ser feliz.
El soñó despierto y ella lo durmió.
Por el camino que el no vio ella se marcho dejando atrás algo que para el solo existió.